
En el Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la canciller de Bolivia, Celinda Sosa, pidió que la hoja de coca sea retirada de la lista internacional de estupefacientes y convocó al Encuentro Mundial de la Madre Tierra hacia el Vivir Bien , que se celebrará en agosto de 2025 en Cochabamba , en el marco del Bicentenario de Bolivia.
Durante su intervención, Sosa presentó siete propuestas clave para fortalecer la agenda indígena global y enfrentar las crisis estructurales que afectan a los pueblos originarios. Entre ellas, destacó:
- La exclusión de la hoja de coca de la Lista I de la Convención de 1961.
- El reconocimiento de los saberes ancestrales como ciencias indígenas.
- La promoción de una Plataforma de Códigos del Vivir Bien.
“Estas propuestas buscan restablecer el equilibrio con la Madre Tierra y valorar los conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas”, informó el Ministerio de Relaciones Exteriores a través de su cuenta en la red social X.
Actualmente, la hoja de coca es sometida a un examen crítico por parte del Comité de Expertos en Farmacodependencia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) . Esta revisión fue impulsada por Bolivia desde 2023, con el objetivo de revertir la clasificación que considera a la hoja de coca como una droga peligrosa , sin tomar en cuenta sus usos tradicionales, espirituales y medicinales.
En respaldo a esta gestión, más de 60 países de Europa y América Latina apoyan la iniciativa boliviana.
En septiembre de 2024, la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) reconoció oficialmente este avance al cambiar la denominación de “coca igual a pasta base” por “hoja de coca igual hoja de coca” en su Lista Amarilla, documento que reúne los estupefacientes bajo fiscalización internacional.
La hoja de coca , en su estado natural, es ampliamente utilizada en Bolivia como infusión o masticado , y está protegida por la Constitución Política del Estado por su valor tradicional, medicinal y cultural.
La canciller Sosa también convocó a una Asamblea Anual de los Pueblos y anunció la realización de una Cumbre Mundial de la Madre Tierra para 2030 , con el propósito de continuar promoviendo políticas que prioricen el respeto a la naturaleza y los derechos de los pueblos indígenas.